Puede que lo mejor sea coger un par de maletas, comprar dos o tres sombreros y unas gafas de sol e irme a casa de mi querida Leila. Un verano en Paris sola, como aquí pero paseando por Courbevoie hasta llegar a Saint-Germain-des-Prés y tomarme un helado con esa tienda de decoración vintage justo delante de mi.
Muy típico de mi, huir de todos los problemas..
Solo hay un problema, y es que los sombreros nunca me han quedado demasiado bien...
5 comentarios:
Sería un verano precioso, desde luego.
Yo te envidiaría, y no solo por los sombreros, que también. Y así te alejarías de tus asquerosos vicios, aunque...serías capaz de alejarte de él... ?
No es él el que me preocupa... Y tanto tu como yo sabemos que no sería capaz de dejar esto... Todo esto, aunque ahora ya no pueda disfrutar del sol y el azul con la persona que quiero...
Yo ni puedo ni he podido, porq cuatro gritos me robaban su sonrisa hasta en las noches de fiestas... y su sonrisa es lo único que quiero, que no la rompan..
Me gusta mucho tu blog . Te sigo :)
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